Chlorophyll Water ha anunciado que sus botellas de 20 onzas líquidas ahora son biodegradables en vertederos, en un movimiento para eliminar la contaminación, reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y recuperar energía renovable limpia.
Para lograr esto, el molde de las botellas se ha integrado con un aditivo orgánico propio que acelera la biodegradación natural de la botella en vertederos biológicamente activos y digestores anaeróbicos.
El aditivo orgánico propio está diseñado para atraer la actividad microbiana dentro del vertedero. A medida que los microorganismos consumen el material aditivo, excretan enzimas que descomponen la botella.
Este proceso hace que la botella de Chlorophylll Water sea 100% reciclable, libre de BPA, no tóxica y ahora, biodegradable en vertederos.
Chlorophyll Water sigue recomendando que sus botellas sean recicladas: cada caja comprada en línea incluye una bolsa de reciclaje; sin embargo, si terminan en un entorno de vertedero, este proceso de biodegradación evita que las botellas se conviertan en contaminantes.
En su lugar, el resultado final son biogases y humus inerte (materia orgánica en el suelo) que pueden generar energía limpia renovable.
Aunque la tasa real de biodegradación dependerá de las condiciones ambientales y la actividad biológica de los microorganismos que rodean la botella, Chlorophyll Water cree que la biodegradación al 100% ocurrirá en hasta 6,82 años.
Como miembro del Green Business Bureau, los productos de Chlorophyll Water se pueden comprar en línea, así como en minoristas seleccionados de salud y bienestar y en mercados orgánicos alrededor de Nueva York.
Desde: https://www.foodbev.com/news/chloroyphyll-water-releases-landfill-biodegradable-bottle/